7 abr 2011

Crítica cinematográfica... de archivo, pero imprescindible ;)

*Esta película es uno de los pilares básicos de mi colección de cerca de 300 películas de dibujos en VHS que están pudriéndose en el cuarto de los juguetes de la casa de mis papás.


Como en el piso azul llevamos varios días (gracias a Pliz :P) con las canciones de Trapito pegadas seguido, voy a dedicar el fotolog de hoy a ese personaje, y también a Sarapin (o Salapin? nunca lo sabremos) (entendiendo Sarapin como el gorrión, no como la hermana peqe de nadie, jiji). El final de la peli siempre me pareció injusto de cojones... (me dispongo a destriparla).

El caso es que Trapito encontraba su ilusión: Sarapin, el gorrión. Y vivía una temporada genial con él, con Larguirucho (y su granja, que si leéis mi fotolog desde hace tiempo ya lo conoceréis:P) y con la sirenita, piratas... vamos que vivía una etapa de esas inolvidable en la vida de cualquier espantapájaros. 

Al acabar sus superaventuras, llegaba el momento de separarse de Larguirucho y los demás, y emprender una vida en común con Sarapin, su ilusión. Pero al final de la película, Sarapin encontraba una gorriona y se iba con ella a formar una familia de gorriones: encontraba su propia ilusión. 

Trapito se quedaba solo como la una, y triste. Entonces, se le aparece el Patriarca de los pájaros.

-Trapito! Trapito!
-Oh! El Patriarca de los pájaros!
-¿Qué haces aquí, pequeño, clavado en la tierra? ¿y tu ilusión? ¿la ilusión que te di?
-Se fue. Me dejó solo.
-Eh? pero... ¿cómo la dejaste ir?
-Es que él también encontró su ilusión, por eso he vuelto a mi lugar, a ser lo que siempre fui: un espantapájaros.
-No hables así, Trapito... recuerda que la ilusión tiene alas como los pájaros, por eso un día puede volar y abandonarnos, pero también porque tiene alas un día puede volver. No lo olvides Trapito, no lo olvides. 


Después de esta conversación, en efecto volvió a aparecer Sarapin, con su familia de gorriones. Trapito y él se ponen mogollón de contentos, y Trapito se va (otra vez) con su ilusión, Sarapin.
Al acabar esta peli son varias las preguntas que se hace un ser humano racional normal y corriente. ¿Por qué Trapito no se fue con Larguirucho a la granja? ¿Por qué Sarapin lo dejó solo, así como así, sabiendo que el pobre Trapito hubiera estado mucho mejor con Larguirucho que esperando por él, de chantón en la tierra? ¿Por qué vuelve Sarapin? y sobre todo ¿por qué Trapito se vuelve a ir con él si le volverá a dejar tirado?

Yo creo que según vamos cogiendo experiencia en esto de que las ilusiones vengan y se vayan, y vuelvan, y nos vuelvan a dejar tirados otra vez... vamos entendiendo mejor la superproducción argentina:P

¿Por qué Trapito no se fue con Larguirucho? Pues porque muchas veces aunque la opción más fácil y más atractiva hubiera sido realmente la correcta, preferimos quedarnos con la opción conocida y por la que se nos ha metido entre ceja y ceja luchar, aunque al pasar unos minutos o meses o años nos vaya a abandonar. Las personas luchamos por lo que queremos, pero ¿por qué seguimos luchando cuando ya no lo queremos? Pues porque no tenemos nada mejor que hacer o eso pensamos, y así creemos que se le da un sentido a nuestra vida. 

Sarapin se va y le deja tirado porque muchas veces nuestras ilusiones no son tal y como esperábamos que fueran, así que éstas cogen y se piran dejándonos solos, y que nos apañemos. Hasta que vuelven, claro, otras nuevas o las mismas, entreteniéndonos y entreteniéndose con nosotros otra temporada, para luego irse y dejarnos o solos, o acompañados, pero dejarnos al fin y al cabo.

El caso es que, volviendo a la peli, yo creo que el final es triste. Trapito solo tiene una ilusión, y sin ella su vida no tiene sentido. Así que su vida depende de que su ilusión venga, se vaya, vuelva o se marche otra vez. 

Yo creo que hay que tener varias ilusiones. Así, en cuanto la primera te decepcione profundamente (que lo hará), puedes buscarte otras mejores o peores, pero que te sirvan para dar un sentido a tu vida... lo que hay que saber es cuándo dejar de luchar por algo que ya no tiene el más mínimo sentido. Y por supuesto, no obcecarse con una sola ilusión y pasar de todo y de todos por ella.

He de decir ya que estoy que ni mi carrera y mi vida profesional fueron nunca mi ilusión central, ni lo serán nunca. El trabajo y los estudios están por detrás de absolutamente todo lo que está por delante, que son muchos Sarapines: familia, amigos e incluso mi perra Rita.

Y si no soy buena periodista, me importa un huevo de avión, o más. Nunca va a estar eso por delante de ser buena persona.

Un saludo, y gracias a quienes hayáis llegado aquí! Está claro que tenéis más tiempo para gastar que yo, o menos remordimientos, jeje:P


Fotolog - publicado el 30/01/2008

1 comentario:

Unknown dijo...

"familia, amigos e incluso mi perra Rita" bien dicho :,)